LA CONCENTRACIÓN Y EL DISCERNIMIENTO

Buda distinguió dos niveles en la práctica de la meditación. En el primer nivel, que exploramos en las dos lecciones iniciales, construimos una base de tranquilidad, calma y enfoque. El segundo nivel comprende la liberación profunda del corazón y el desarrollo de la sabiduría y conocimiento de cómo son las cosas en realidad— en otras palabras, discernir la naturaleza de nuestra existencia y el papel  que desempeñamos en el universo.

Ocasionalmente, estos dos niveles en la meditación se presentan como distintos y separados, con técnicas específicas indicadas para desarrollar cada nivel. Sin embargo, Ajahn Chah y Ajahn Sumedho (monje norteamericano y líder del Linaje Del Bosque tailandés de Ajahn Chah en Occidente) enfatizan que es más preciso contemplar estos dos niveles como parte de un todo. En lugar de describirlos como cualidades distintas no relacionadas, es más exacto verlos como fases o atributos de una sola realidad fundamental en la práctica. Digamos que son como observar la flor de un manzano y morder la manzana ya madura— la flor no se parece a la manzana, pero son parte del mismo proceso.

AJAHN AMARO

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

  • Traducir