La Visión Correcta

La primera practica del Noble Octuple Sendero es la Visión Correcta que consiste principalmente en comprender profundamente las Cuatro Nobles Verdades.

La Visión Correcta radica en conocer cuál de los cuatro tipos de alimentos que hemos ingerido ha causado lo que acaba de crearse.

En el fondo de nuestra consciencia tenemos semillas sanas e insanas. El entorno en el que vives puede regar tus semillas sanas pero también las insanas. La practica de ser conciente nos ayuda a identificar las semillas en el almacén de nuestra consciencia y a regar las que son más sanas. Hay personas que con solo verlas nos hacen sentir incómodos y hay otras que nos caen bien ante el primer acercamiento.

Hay algo en cada una de ellas que nos hace sentir una semilla de nuestro interior. Si sentís mucho aprecio por tu madre y tu padre te hace sentir tenso, es normal que al encontrar una persona que te recuerda a tu madre la aprecies, y al encontrar a una que te recuerde a tu padre tengas deseos de alejarte. De ese modo podemos –ver- las semillas de nuestro interior. Cuando somos concientes de las semillas que albergamos en el almacén de la consciencia, no nos sorprenderá nuestra propia conducta ni la de los demás. (- Estas enseñanzas no promueven el aislamiento, al contrario, pretenden que conformemos una comunidad armoniosa. Por lo que valoran mucho la relación con nuestros semejantes, tanto como con cualquier otro elemento de nuestro entorno. Para el budismo el hombre es un ser naturalmente sociable, y este es quizá el principal motivo de sus enseñanzas. -)

La semilla de la budeidad, la capacidad de despertar y comprender las cosas tal como son, está también presente en cada uno de nosotros.

Si siembras maíz crecerá maíz. Si siembras harina crecerá harina. Si actúas de una manera sana, serás feliz. Si actúas de una manera insana, estarás regando las semillas del deseo, la ira y la violencia que hay en ti. La Visión Correcta es reconocer que semillas son sanas y estimularte a regarlas. Esto se denomina el –sentir selectivo-.

En la base de nuestras opiniones se encuentran nuestras percepciones. Buda nos aconsejó no dejarnos engañar por lo que percibimos, dijo: “Donde hay percepción, hay engaño”. La mayoría de nuestras percepciones son erróneas, gran parte de nuestro sufrimiento surge de percepciones erróneas. Debemos preguntarnos una y otra vez “Estoy seguro?”. Hasta que no veamos con claridad, nuestras percepciones erróneas nos impedirán tener la Visión Correcta.

Percibir siempre significa percibir algo. Creemos que el objeto de nuestra percepción (por ejemplo una flor) está fuera del sujeto (nuestra consciencia), pero no es correcto. Cuando contemplamos la luna, la luna se encuentra en nuestro interior porque es el objeto de nuestra percepción, la luna es nuestra consciencia. Debemos abandonar la idea de que nuestra consciencia está fuera de la luna. Es imposible tener un sujeto sin un objeto.

El origen de nuestra manera de ver yace en el almacén de nuestra consciencia. Si diez personas miran una nube habrá diez percepciones diferentes. Nuestras percepciones acarrean en si mismas todos los errores de la subjetividad. De modo que alabamos, condenamos o nos quejamos según nuestras percepciones. Pero están hechas de nuestras aflicciones: de deseo, ira, ignorancia, visiones erróneas y prejuicios. Que seamos felices o suframos depende en gran medida de nuestras propias percepciones, por eso es tan importante observarlas a fondo y conocer su origen.

Albergamos una idea de felicidad. Creemos que con determinadas condiciones seremos felices. Pero es a menudo nuestra propia idea de felicidad lo que nos impide ser felices. Debemos observar profundamente nuestras percepciones para poder liberarnos de ellas, no se trata de una no-percepción, sino de una clara visión, de ver las cosas tal como son. (- A través de las percepciones vamos adoptando desde chicos una idea de lo que somos nosotros y de lo que es la felicidad que muy probablemente nos impida ser felices. Buscarnos a nosotros mismos más allá de las percepciones, intentar conocernos profundamente, tratar de ver las cosas tal como son, es lo que nos acercará a nuestra genuina felicidad -)

Nuestra felicidad y la felicidad de los seres que nos rodean depende de nuestro grado de Visión Correcta. Sentir la realidad profundamente – sabiendo lo que ocurre dentro y fuera de nosotros – es la forma de liberarnos del sufrimiento causado por las percepciones erróneas. La Visión Correcta no es una ideología, ni un sistema, ni siquiera un camino. Es la visión que tenemos de la realidad de la vida, una viva visión que nos llena de comprensión, paz y amor.

A veces observamos que alguien hace cosas que le causarán sufrimiento en un futuro pero probablemente no nos escuche cuando intentamos advertírselo. Todo cuanto podemos hacer es estimular en ellos las semillas de la Visión Correcta, y más tarde, en algún momento difícil quizá se beneficien de nuestra guía. No podemos explicar el sabor de una naranja a alguien que nunca la ha probado. Por muy bien que lo describamos, no podemos lograr que esa persona tenga una experiencia directa de ello, ha de probarla personalmente. Tan pronto pronunciamos una sola palabra, ya ha quedado atrapado en ella. La Visión Correcta no puede describirse, solo podemos apuntar en la dirección correcta. La Visión Correcta no puede ser ni siquiera transmitida por un maestro, el puede ayudarnos a identificar la semilla que ya está en nuestro jardín pero nosotros somos el jardinero. Debemos aprender a regar las semillas sanas que hay en nosotros, y el instrumento que tenemos es vivir con plena consciencia: respirar, andar y vivir cada momento del día de manera conciente.

Un maestro conocido decía: “Mientras el árbol esté detrás de ti, solo podrás ver su sombra. Si quieres ver la realidad tienes que darte la vuelta”. Las enseñanzas-imagen utilizan palabras ideas. Las enseñanzas-esencia se comunican a través de la manera en que vives.

Tu concepto o percepción de la realidad no es la realidad. Cuando quedas atrapado en tus percepciones e ideas, pierdes la realidad. (- El contacto con la realidad es algo más profundo que el contacto que podemos establecer mediante nuestras percepciones. Las palabras, las ideas, las imágenes, las explicaciones, que puedas emitir o percibir nunca podrán alcanzar la totalidad de las cosas. Intenta absorber la esencia y transmitirla a través de tu forma de vida; menos conceptos más vida, o bien, habla menos, practica más. -)

La no-idea es la senda del no-conceptuar. En tanto haya una idea, no pueden manifestarse ni la realidad ni la verdad. La no-idea significa que no hay una idea ni una concepción errónea. No significa que no haya consciencia, ya que es gracias a ella que cuando algo es correcto sabemos que lo es, y cuando es incorrecto, sabemos también que lo es.

Lo correcto o lo incorrecto no es objetivo, sino subjetivo. (- Las verdaderas enseñanzas no pretenden mostrarnos un único camino, sino ayudarnos a realizar el nuestro. -)

El budismo no es una serie de visiones, sino una practica que nos ayuda a eliminar las visiones erróneas. Desde el punto de vista de la realidad última, la Visión Correcta es la ausencia de visiones.

Las ocho practicas del Noble Óctuple Sendero se nutren unas a otras. A medida que nuestra visión se vuelve más –correcta- los otros elementos del Noble Óctuple Sendero se vuelven también más profundos. La Visión Correcta es tanto una causa como un efecto de los otros elementos del sendero.

Thay

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