La Gota de Miel
Se trataba de un bondadoso y sabio anciano que nunca había deseado tener discípulos propiamente dichos, pero que era muy a menudo visitado por las gentes que deseaban sentirse tranquilas en su presencia y recibir sus enseñanzas. No le gustaba hablar en exceso y de vez en cuando despegaba los labios…