Autor: Ryushin
Tres clases de aprendizaje
El camino budista tiene su fuente en tres clases de aprendizaje: la disciplina, la concentración y la introspección. La disciplina sujeta la mente con regulaciones, la concentración ilumina la mente con la quietud, la introspección aclara la mente con la sabiduría. Si el estudiante practica la introspección sin concentración o…
No te aferres al almohadón
El límite del esfuerzo
El marco de la base original
Reflexiona sobre una sentencia
Ten fe en ti mismo, y recuerda la sentencia sobre la que reflexionas. Continúa examinándola; aunque tardes mucho tiempo algún día llegarás a captar su significado. Mientras tanto, no albergues ningún sentimiento de duda, ni te des ninguna prisa en conseguir la Iluminación. Cuando reflexiones sobre una sentencia, aunque percibas…
Esto También Pasará
Catorce Preceptos
Esforzarse en estudiar
La auténtica naturaleza búdica
El camino sutil
El camino sutil de los budas y maestros zen no es una irracional creación de complicados problemas, ni tampoco rareza o excentricidad. No se trata de algo de gran majestuosidad y difícil de practicar: simplemente es aquello que utilizas continuamente en tus actividades cotidianas. Si tuviéramos que darle un nombre,…
Las actividades cotidianas
El camino se halla en las actividades cotidianas; cada día, sin darnos cuenta, lo estamos utilizando. Por eso se dice: «El conocimiento es una falsa conciencia, el desconocimiento es indiferencia». En este caso dime, ¿el conocimiento, es bueno o malo? Los antiguos maestros, desde tiempos inmemoriales, y los peregrinos de…
El punto central de la puerta del zen
La perla negra
Cuando tienes una total claridad, no creas ninguna distorsión subjetiva; cuando eres absolutamente puro, está en ti la auténtica percepción. Pero aunque poseas estas dos cualidades en lo más profundo de tu ser, todavía no estás en poder de la llave trascendental. Cuando el viento y las olas desaparecen, el…
Las fabricaciones mentales
Si me fijo en las personas que actualmente buscan el camino, descubro que ninguna de ellas parece hallarlo. ¿Por qué? Algunas controlan sus mentes para aquietarlas, otras serenan sus pensamientos para conseguir un equilibrio. Pero todo ello no es otra cosa que fabricaciones mentales. En realidad, no tienen ningún dominio…